Autorizado por la
Consejer�a de Sanidad
de la Comunidad de Madrid
Registro n� CS-5898
 

Centro de Psicología y Salud

Atendemos mediante cita previa



Inicio Quienes somos Donde estamos Servicios Metodología Colaboraciones Enlaces Última hora Contactar Mapa Web 
 

LO M�S SOLICITADO

PSICOLOG�A CL�NICA
Adicci�n a las compras
Adicci�n al ejercicio f�sico
Adicci�n a las nuevas tecnolog�as
Adicci�n al trabajo
Agorafobia
Anorexia nerviosa
Ansiedad generalizada
Ansiedad inducida por sustancias
Ataque de p�nico
Bulimia nerviosa
Control de la ira
Depresi�n
Esquizofrenia y otras Psicosis
Fobias espec�ficas: animales, ambientales, sangre/da�o/inyecci�n. situacionales.
Fobia social
Hipocondr�a
Juego patol�gico
Man�a
Obesidad
Patolog�a dual: trastorno ps�quico con abuso de sustancias
Somatizaciones
Trastorno de ansiedad por separaci�n
Trastornos del aprendizaje
Trastorno bipolar, episodios man�aco-depresivos
Trastorno de conversi�n
Trastornos por d�ficit de atenci�n y comportamiento perturbador
Trastorno dism�rfico corporal
Trastornos disociativos/ despersonalizaci�n
Trastorno por dolor
Trastorno por estr�s agudo
Trastornos por estr�s postraum�tico
Trastorno obsesivo-compulsivo
Trastornos de la Personalidad
Trastornos del Sue�o
PSICOLOG�A JUR�DICA
Credibilidad Testimonio
Detecci�n Maltrato/Abuso Infantil
Perfiles Psicol�gicos
Peritajes Civiles/Penales
PSICOLOG�A EDUCATIVA
Dificultades Adaptaci�n Escolar
Fracaso Escolar/ Desmotivaci�n/ T�cnicas de Estudio
Informes Psicopedag�gicos
Orientaci�n Acad�mica/Profesional
TERAPIA DE PAREJA Y DE FAMILIA
Celos/Celotipia
Crisis de pareja y familiares
Dependencia emocional
Duelo
Familias Reconstituidas
Separaciones/Divorcios
PSICOLOG�A PREVENTIVA Y PROMOCI�N DE LA SALUD
Escuela de Padres
Programas Prevenci�n
Programas Promoci�n
SEXOLOG�A: TERAPIA SEXUAL
Adicci�n al sexo/ Hipersexualidad
Anorgasmia femenina
Anorgasmia masculina
Aversi�n al sexo
Dificultades de lubricaci�n en la mujer
Dolor en el coito/ Dispareunia
Eyaculaci�n precoz
Eyaculaci�n retardada/ inhibida
Falta de deseo sexual
Parafilias
Problemas de erecci�n
Trastornos Identidad Sexual/Disforias G�nero
Vaginismo

CARTERA DE SERVICIOS COMPLETA

    Más que Terapia...  
 


Familia es la arena sobre la que la gente puede expresarse a s� misma en toda su complejidad.
Salvador Minuchin. Entrevista realizada por Richard Simon, editor de The Familiy Therapy Networker. Publicado en  Perspectiva Sist�mica. La nueva Comunicaci�n.

 

�Qu� es la Terapia familiar y de pareja?

La Terapia de Pareja y Familia es el �rea de la Psicolog�a que se encarga del estudio de las relaciones humanas. Por decirlo de un modo m�s sencillo, en Terapia de Pareja, por ejemplo, se trabaja con las dos personas y con su relaci�n, es decir, que una pareja no son dos, sino tres: Cada miembro, m�s la relaci�n que han establecido. 

Las relaciones, al igual que las personas, no son est�ticas. Requieren de modificaciones constantes tanto por la influencia de los miembros que la forman, como del ambiente (familiares, amigos, trabajo, entorno social, etc.). La pareja o la familia tienden a establecer unos patrones o pautas de comportamiento que mantienen su equilibrio. Pero, como los cambios son inevitables, a lo largo de su historia tendr� que enfrentarse a momentos en los que sea imprescindible que se modifiquen las estrategias habituales, que se reajuste la relaci�n, para encontrar un nuevo equilibrio m�s funcional en la nueva situaci�n. Aunque cada relaci�n es diferente, es un universo, y hay m�ltiples factores que pueden propiciar una crisis, existen algunos momentos clave en el ciclo vital de las parejas y las familias:   

  • El comienzo de la vida en pareja.

  • De la pareja a la familia. La llegada de los hijos.

  • El comienzo de la escolaridad de los hijos.

  • Los hijos adolescentes.

  • La separaci�n o divorcio en la pareja.

  • Las familias reestructuradas. Cuando pap� o mam� tienen nueva pareja.

  • El reencuentro con la pareja. El nido vac�o (la independencia de los hijos).

  • La familia y uno m�s. El cuidado de alguna persona mayor.

  • La jubilaci�n.

  • La p�rdida de alguno de los miembros.

�Qu� es una intervenci�n de pareja o familia? 

Ante las crisis hay relaciones que son capaces de utilizar nuevos recursos que les permitan encontrar un nuevo equilibrio y superar las dificultades. Sin embargo, otras se encuentran bloqueadas y no son capaces de adaptarse a los cambios o intentan mantener viejos h�bitos que han dejado de ser eficaces, lo que puede derivar en el empobrecimiento de la relaci�n, aumentando el malestar de los miembros implicados, conflicto, discusiones constantes, falta de comunicaci�n, desilusi�n, enfado, tristeza, etc.  

En estos casos, en los que se produce bloqueo en la relaci�n de pareja o familiar que impide superar la crisis, el Especialista de Pareja y Familia eval�a el estado de la relaci�n, realiza un diagn�stico, asesora a los miembros o propone un tratamiento adaptado a sus necesidades. El objetivo principal es que los miembros de la relaci�n conozcan y utilicen nuevos patrones relacionales y estrategias de soluci�n de conflictos m�s eficaces, que les faciliten la adaptaci�n a los cambios y les permita recuperar su equilibrio y bienestar.

Las problem�ticas m�s frecuentes en el �mbito de la pareja y la familia son:
 

Crisis Familiares. Problemas paterno-filiales, de la relaci�n entre hermanos, HIJOS CONFLICTIVOS:

El objetivo de la intervenci�n en crisis familiares es ayudar a las familias a afrontar los problemas, conflictos o cualquier circunstancia adversa que se pueda dar a lo largo de su ciclo de vida. La filosof�a de trabajo se basa en promover la comunicaci�n, la convivencia y el bienestar de las familias, potenciando al m�ximo su funci�n socializadora y educadora. 
Las familias reciben informaci�n, orientaci�n y atenci�n psicol�gica con el objetivo de abordar el riesgo de aparici�n de situaciones de conflictividad o afrontar los conflictos ya existentes.

Algunas cuestiones que se suelen abordar son:

  • Asesoramiento a los padres para potenciar y favorecer el establecimiento de v�nculos afectivos seguros, poner normas y l�mites al comportamiento de sus hijos, para facilitar que se desarrollen de manera equilibrada.

  • Pedir apoyo para minimizar las consecuencias negativas de un proceso de ruptura familiar.

  • Evitar la evoluci�n y agravamiento de conflictos familiares: adolescentes conflictivos, problemas entre hermanos, comportamientos perturbadores de los hijos, falta de motivaci�n hacia los estudios, violencia en el �mbito familiar, consumo de drogas, etc.

DEPENDENCIA EMOCIONAL:

Depender de la persona que se ama es un acto de automutilaci�n psicol�gica donde el amor propio, el autorrespeto y la esencia de uno mismo son regalados irracionalmente al otro. El fin de entregarse es preservar lo bueno que ofrece la relaci�n pero, bajo el disfraz de amor rom�ntico, la persona dependiente comienza a sufrir despersonalizaci�n hasta convertirse en el anexo del otro. La persona dependiente vive con la constante amenaza de que la relaci�n pueda terminar y, con el fin de evitarlo, utilizada todo tipo de estrategias que suelen provocarle malestar.  En muchos casos, a pesar de que la evaluaci�n de la relaci�n sea negativa, su miedo a la soledad le impide terminar con ella.
 

Celos/Celotipia:

Los celos son un sentimiento o emoci�n que surgen como consecuencia de un exagerado af�n de poseer algo de manera exclusiva. Su base es la infidelidad, real o imaginaria. Est�n m�s condicionados por el deseo de propiedad que por el deseo er�tico. 

En todas las relaciones amorosas hay que aceptar la incertidumbre respecto al presente y al futuro. Se consideran celos patol�gicos cuando se experimentan con mayor frecuencia en el marco de la relaci�n afectiva. El celoso es consciente de que no hay pruebas objetivas acerca de la infidelidad, pero no puede evitar pensar en ello, lo que da lugar a un malestar ante lo que se percibe como amenaza (real o no) para la relaci�n. Durante los episodios de celos se experimenta un intenso miedo a perder la pareja, temor a quedarse solo afectivamente, sentimiento de verg�enza y humillaci�n, p�rdida del sentimiento de exclusividad sexual e incertidumbre ante el futuro. La sensaci�n de malestar centra la atenci�n en el tema e interfiere negativamente en la capacidad de concentraci�n hacia otras tareas. Adem�s, puede generar ataques de c�lera cuando la pareja menciona otras relaciones tenidas en el pasado. El celoso solo logra aliviar sus celos con conductas comprobatorias que est�n dirigidas a corroborar la veracidad de sus creencias. Estas conductas normalmente producen un alivio pasajero y mayor malestar a largo plazo. Por otra parte, la v�ctima del celoso puede llegar a un estado de desesperaci�n o a sentirse culpable de la situaci�n.

Los celos patol�gicos no son una muestra de amor. En realidad se confunde amor con posesi�n. No tienen funcionalidad, no producen placer y son la cadena perpetua a la que se condena al afecto.
 

Crisis Pareja. Problemas conyugales:

La pareja actual se caracteriza por ser m�s flexible y expresiva, pero tambi�n es m�s fr�gil. Se hace imprescindible, por tanto, el trabajo de la comunicaci�n para que ambos puedan expresar libremente lo que esperan de uno mismo, del otro y de su relaci�n, y la negociaci�n para alcanzar acuerdos con los que ambos se encuentren satisfechos, sin necesidad de establecer una lucha de poder. Temas de los que se hace necesario hablar y negociar en la pareja suelen ser:

  • El conocimiento mutuo.

  • La construcci�n de la relaci�n.

  • Los proyectos individuales y comunes. Las prioridades de cada uno y de la pareja.

  • El tipo de vida que se desea llevar.

Cuando existe mucha diferencia entre las expectativas de cada uno y la realidad, se estar�an inoculando los primeros ingredientes para el desarrollo de un conflicto de pareja. El conflicto se llegar� a dar o no dependiendo de una serie de caracter�sticas de la relaci�n: las habilidades para resolver conflictos, la comunicaci�n, las circunstancias en las que se encuentren (paro, hijos, econ�micas, ...).

Algunas cuestiones que suelen generar conflictos de parejas son:

  • Falsas expectativas hacia la pareja.

  • Secretos en la pareja.

  • Mentiras, enga�os.

  • Luchas de poder.

  • Distanciamiento emocional.

  • Falta de comunicaci�n.

  • Divergencia en la gesti�n de tiempo, ocio, relaciones con amigos o con las familias de origen de cada uno, en la crianza de los hijos, en las tareas dom�sticas o en el desarrollo profesional.

Entre objetivos de la Terapia de Pareja se encuentran: conocer la problem�tica espec�fica de la pareja y dise�ar un tratamiento adecuado a la situaci�n con el fin de generar cambios en el comportamiento de los miembros, en los procedimientos que usan para resolver conflictos (que eliminan las amenazas, las rega�inas, peleas o las relaciones con terceros, y que sean capaces de afrontar la resoluci�n de una manera m�s sana para ambos), para que dispongan de recursos y refuerzos que les permitan mejorar su la relaci�n y superar la crisis.
 

Separaciones/Divorcios/nulidades:

Querer separarse es el requisito previo para poder hacerlo, pero entre querer y poder hay un espacio (psicol�gico y cronol�gico) que es necesario recorrer. Lo que determina c�mo se desarrolle la separaci�n no es tanto el motivo como la motivaci�n de los miembros de la pareja

La separaci�n ideal ser�a la bilateral iniciada por dos personas maduras que, de forma consensuada, decidieran hacerlo. Sin embargo, lo m�s frecuente es que sea uno de los miembros el que decide separarse, mientras que el otro desea mantener el v�nculo. La intervenci�n en estos casos consiste en trabajar con los miembros de la pareja para procurar que la separaci�n se realice de la manera m�s sana, psicol�gicamente hablando, para ambos, que haya
aceptaci�n de la nueva realidad y superaci�n de la p�rdida. Cuatro claves favorecen la correcta superaci�n:

  • Conseguir una actitud adecuada. De aceptaci�n del sufrimiento y disminuci�n del desgaste emocional.

  • Mantener la actitud durante el tiempo necesario.

  • Recuperar alicientes del pasado y buscar otros nuevos.

  • Construir una nueva realidad.

Ruptura Familiar:

Cuando una familia se rompe, lo que les expliquemos sobre la separaci�n a nuestros hijos les ayudar� a prepararse y adaptarse a los cambios que se van a dar en la nuevas etapa.

La separaci�n no es perjudicial en s� misma para los hijos sino que va a depender de c�mo se realice, de c�mo se comporten los padres y de qu� decisiones se tomen.


La intervenci�n en casos de ruptura familiar se centra en procurar que los cambios se lleven a cabo de la manera menos perjudicial o dolorosa para cada uno de los miembros que componen la familia, poniendo especial cuidado en los menores. 
 

Familias Reconstituidas:

El modelo de familia est� cambiando y en los �ltimos a�os han aparecido nuevas  modalidades de organizaci�n familiar. Las parejas que se separan, o pierden a uno de sus miembros, y contraen nuevas nupcias o conviven con sus nuevas parejas, se denominan familias reconstituidas. Son estructuras familiares en las que al menos uno de los miembros de la pareja tiene hijos de parejas anteriores, teniendo las nuevas parejas el rol de padrastro o madrastra.

Dicha estructura tiene un funcionamiento diferente al modelo de familia nuclear tradicional, puesto que las situaciones conllevan movimientos distintos (por ejemplo, el papel de la nueva persona, el r�gimen de visitas, etc.). Un error que es habitual se cometa es el de pretender que el funcionamiento de la familia reconstituida sea como el de la familia tradicional (por ejemplo, distanciar al otro c�nyuge,
intentar que los lazos afectivos sean fuertes desde el principio, tomar decisiones en la educaci�n de los hijastros, etc.). Aunque cada familia reconstituida tiene sus peculiaridades, algunas situaciones dif�ciles que suelen surgir son:

  • Desconocimiento e incertidumbre entre los miembros de la familia sobre c�mo comportarse y relacionarse, as� como de lo que esperan unos y otros.

  • Que la nueva pareja se comporte evitando ser etiquetado en negativo y trate de complacer a los hijos de su pareja a toda costa.

  • Que la nueva pareja se sienta fuera, como un extra�o en la convivencia.

  • Rechazo inicial de los hijos hacia el padrastro o madrastra, en ocasiones fomentado por uno de los padres.

  • Dificultades en la organizaci�n familiar, al haber cambios en la din�mica, cada vez que el hijo va a pasar unos d�as a casa del otro progenitor.

  • Los hijos pueden sentir que fallan al otro progenitor si se llevan bien con la nueva pareja del otro.

  • Discrepancias entre la pareja por las cuestiones econ�micos de las manutenciones.

  • Trato diferente a los hijos de la nueva pareja y a los de las relaciones anteriores por parte de los adultos.

Duelo:

La p�rdida del ser amado es psicol�gicamente tan traum�tica como herirse gravemente lo es en el plano fisiol�gico. Tras sufrir una herida, si se tiene cuidado en el proceso de curaci�n, se puede recuperar el funcionamiento de la zona afectada. Pero tambi�n  hay personas que no cuidan las recomendaciones para su salud y su curaci�n es inadecuada. Del mismo modo, se necesita un periodo de tiempo para que la persona en duelo vuelva a un estado de equilibrio similar. Adem�s, la persona habr� de realizar una serie de tareas que le aseguren un restablecimiento adecuado.

El duelo lo ha facilitado tradicionalmente la familia, los rituales de funeral y otras costumbres sociales. Pero actualmente muchas personas buscan la intervenci�n psicol�gica profesional que les facilite el proceso o
les ayude a para identificar y resolver los conflictos que les bloquean e imposibilitan continuar viviendo.

 

 

� 2006 Terapia y M�s C.B.       Resoluci�n de pantalla recomendada 1024 x 768.       Aviso legal       
Fecha de �ltima actualizaci�n: 3 de junio 2013